La hegemonía de la lengua es uno de los objetivos clave del nacionalismo catalán, en un grado muy superior al caso del nacionalismo vasco. El uso de la lengua como herramienta diferenciadora ha sido siempre una prioridad para el movimiento independentista, y solo la necesidad de ampliar su base social ha hecho posible que un partido tan firmemente monolingüista como ERC (solo hay que recordar cuando el ex-líder de ERC Joan Puigcercós se negaba a responder en español a otro catalán, en directo y en televisión, argumentando que así "le hacía un favor") tolere la presencia del idioma español hasta el punto de hacer posible que el principal portavoz del partido sea Gabriel Rufián, un "charnego" hispanohablante, algo que apenas tolera una parte importante de su partido y que el político nacionalista intenta hacerse perdonar día sí y día también defendiendo con uñas y dientes la marginación de su propia lengua materna.
Pero este objetivo, que pocas veces se cuestiona, se discute o tan siquiera se menciona, ha sido cuestionado de forma oficial por el partido que hasta ahora menos podía preverse que lo hiciera: El PSC.
Y es que los socialistas catalanes, con Iceta al frente, se habían caracterizado hasta ahora por defender a ultranza la inmersión lingüística en catalán o "immersió". Tal normativa, impuesta por el nacionalismo y que jamás ha podido ser refrendada por los ciudadanos de Cataluña, había sido posible gracias a las competencias cedidas desde Madrid por los partidos mayoritarios, y hasta ahora solo había sido confrontada por Ciudadanos, aunque esta oposición se hizo cada vez más leve según el partido de Albert Rivera fué dejando de centrar todos sus esfuerzos en rebatir el nacionalismo y los dedicó a competir con el Partido Popular por su espacio electoral, con los resultados que todos conocemos.
Sin embargo esta pasada semana el líder de los socialistas catalanes se ha descolgado sorpresivamente con una propuesta para "flexibilizar" la "immersió" de forma que el idioma español pueda volver a ser lengua vehicular en algunas clases y en algunos colegios haciendo que la Inmersión Lingüística sea "más flexible", reforzando el catalán en algunos centros (aunque si ya es el 100% no veo como puede ser posible), reforzando el español en otros y el inglés en todos los casos.
Ignoro si las motivaciones de Iceta son genuinamente mejorar la calidad de la enseñanza en Cataluña o si está asumiendo algunas de las premisas de Ciudadanos para ampliar su base electoral. Si se trata de esto último, no puedo negar que la jugada es inteligente. Es bien sabido que la Inmersión Lingüística tiene como defensores a los nacionalistas catalanoparlantes más identitarios, pero que de ser votada en referéndum sería seguramente rechazada por la mayoría de catalanes, muchos independentistas incluidos, pues no quieren que a sus hijos se les prive de una poderosa herramienta de comunicación como es la segunda lengua materna más hablada del mundo tras el chino. Y esa falta de consenso es la razón por la que el nacionalismo nunca ha permitido que se vote.
La propuesta de Iceta mejoraría la situación actual, pero no es ni de lejos la idónea. Permitir a cada centro o a cada municipio regular el procentaje de aplicación de la Inmersión lingüística solo acrecentaría la diferencia entre catalanes. Existen muchas fórmulas mejores, como la propia enseñanza trilíngüe propuesta en su día por Ciudadanos en la que español, catalán e inglés tuviesen el mismo peso. Otras propuestas más asimétricas podrían otorgar un 25% a cada una de las tres lenguas dejando el 25% restante a la libre disposición de cada centro. Una propuesta así permitiría que en escuelas de la Cataluña interior se diera un 25% en Español, un 50% en Catalan y un 25% en inglés, mientras que en Hospitalet o Castelldefels el Español podría llegar al 50%, con un 25% de Catalán y un 25% de Inglés. Casos especiales como el Valle de Arán, que tiene una lengua adicional podría tener un 25% para cada lengua y dedicar el 25% restante al Aranés. Si la propuesta de Iceta fuese en ese sentido, asimétrica pero con unos mínimos sólidos, estaríamos ante una propuesta con capacidad de asentarse como modelo educativo adaptable pero no divisivo.
Otro movimiento inteligente es el de no plantearlo ante los partidos nacionalistas como una derogación de la "immersió", sino como una "adaptación" o "flexibilización", ya que el nucleo más duro e identitario del nacionalismo tiene como uno de sus axiomas más sagrados "la llengua no es toca" (la lengua no se toca).
Quienes se han quedado sin palabras son los partidos constitucionalistas, posiblemente por no haberse atrevido a plantear esa iniciativa (o a defenderla adecuadamente en el caso de Ciudadanos). Muchos padres hispanohablantes (más de la mitad de catalanes, según la propia Generalitat) verían con buenos ojos esta flexibilización, lo que permitiría al PSC arañar en unos próximos comicios catalanes un buen porcentaje de votos hispanohablantes procedentes de Ciudadanos o de los "Comunes" y superar de ese modo a Esquerra Republicana.
Sea como sea, lo indudable es que volver a poner sobre la mesa la cuestión lingüística tiene varias interesantes consecuencias en el futuro inmediato:
- Se ha roto la espiral de silencio sobre el tema de la lengua, algo que ha de reflejarse en las asociaciones de padres, los partidos políticos y en asociaciones por los derechos de los hispanohablantes tales como "Hablamos Español".
- Hará que los partidos nacionalistas reaccionen fieramente defendiendo su territorio y desmintiendo sus afirmaciónes de "aixó va de democracia.." porque esto va de supremacismo cultural.
- Hará que los partidos constitucionalistas entren en una pugna por defender algo tan sensato como el derecho al bilingüísmo en las comunidades españolas que disponen de esa riqueza cultural.
Finalmente, y dado lo pertinente del tema, me permitiré finalizar este artículo con el reciente video de la serie monográfica #HablemosClaro en el que analizamos el uso de la lengua por parte del nacionalismo.
Y dado que en este medio SI aplicamos el trilingüísmo no está de más señalar que tanto este artículo como el vídeo están realizados en Español, Catalán e Inglés, por lo que solo teneis que cambiar de idioma en el menú superior para leer o visionar el contenido en el idioma de vuestra elección.